Salida a Cànoves.

A las 07:50h. salimos de la rotonda de Castellar, Dani y yo, camino de Caldes de Montbuí. El ritmo es ligerito pero llevadero, ya que vamos con bastante tiempo de margen para encontrarnos con Óscar.

En Caldes se nos une Óscar Baena y el ritmo es bastante amigable hasta el almuerzo.

Después del almuerzo, empiezo a tener bastante frío y me doy cuenta de que las piernas, por fin, funcionan bastante bien. Empiezo a marcar un ritmo fuerte hasta Cardedeu, donde Óscar y Dani dan algún que otro relevo para que el ritmo no baje.

En Cardedeu, Óscar tuerce hacia La Roca para encaminarse a Badalona, y Dani y yo continuamos dirección Granollers. En este punto sí es verdad que Dani me comenta que las sensaciones suyas no son buenas (más tarde comprobé que era una mentira tan grande como la Catedral de Burgos) ja ja ja ja.

En Granollers un calvario atravesar el maldito mercadillo de los domingos, pero tras comprar alguna que otra cosilla ja ja ja ja, nos encaminamos hacia Caldes, donde en el tramo de Santa Eulàlia a Caldes, Dani coge las riendas y comienza a marcar un ritmo alto y un tanto exigente. Por un momento dudo de poder aguantar este ritmo, pero para sorpresa mía, veo que lo aguanto y bastante bien, empiezo a estar contento y un poco crecido después de tantas semanas con sensaciones malísimas y mordiendo el polvo.

Tras pasar Sentmenat pruebo a marcar un ritmo bastante alto para ver si consigo aguantar, pero un poquito antes de la Central Eléctrica, veo que empiezo a flaquear y decido aflojar, Dani afloja conmigo y amigablemente llegamos a Castellar.

Pasamos Castellar y sorprendentemente veo que vuelvo a encontrarme bien, he recuperado, algo imposible estas semanas atrás, y decido volver a marcar un ritmo alto prácticamente hasta el Hockey y Dani no se despega de mí ni un instante, prueba irrefutable de que no iba tan mal como él decía, aguantó sobrado como un campeón.

David